Hierro forjado: verdades y mentiras

Es muy común que los herreros ofrezcan trabajos que llaman "hierro forjado", aunque en realidad es solo imitación de un verdadero trabajo de forja o de hierro forjado a mano.

Es importante que conozcas bien las diferencias entre un trabajo y otro, de esta manera podés saber si estás pagando por un trabajo correctamente elaborado o bien te están vendiendo una copia "trucha" de lo que querés comprar.

A continuación un ejemplo de "Forja" de imitación:

El problema con este tipo de "Forja" es que sus bordes cortantes pueden lastimar a la gente en la casa (sobre todo si hay chicos) y aunque algunos herreros argumentan que ese es el propósito de la forja, es un argumento inválido, porque ningún ladrón toca esas partes de las rejas cuando trata de entrar a una casa.

En todo trabajo de herrería es importante lijar y emprolijar muy bien las uniones para evitar que se genere óxido y que tenga un mal aspecto como el que se muestra en el ejemplo.

Otro defecto de estas imitaciones es que sus formas no son agradables a la vista, parecen ganchos con filos generados por un mal corte, una figura de verdadero hierro forjado debe tener una forma agradable y conservar una graciosa continuidad.

A continuación dos ejemplos de Hierro Forjado real:

Las uniones deben de ser lisas y no verse soldaduras o rayas generadas por el pulidor.

Este tipo de forja es hecha a mano por expertos, se requiere amplios conocimientos en herrería para lograr un "botón" en las puntas de las figuras que logre que estas sean suaves, inofensivas y bonitas.